Esta camiseta hecha completamente de plantas y algas fue desarrollada por la empresa Vollebak. Aunque es muy similar a una prenda ordinaria, la camisa está destinada a compostarse en el suelo una vez finalizada su vida útil.
“Cada cosa negra que posee probablemente contiene negro de carbón, un pigmento extraído del petróleo”, dice la compañía. El bolígrafo negro, la carcasa negra del teléfono, los neumáticos del coche. El pigmento está presente en nuestra vida diaria. En busca de alternativas sostenibles, la solución de Vollebak está en la unión de naturaleza y tecnología.
En asociación con la startup estadounidense de biomateriales Living Ink, la compañía creó una tinta negra hecha de residuos de algas negras. Estas algas crecen libremente en grandes estanques, donde se cosechan para triturarlas en un polvo fino, purificarlas y luego mezclarlas con un aglutinante a base de agua para producir pintura de algas negras.
El proceso resultante no es exactamente un tinte común para teñir fibras. Lo que la empresa logró hacer fue imprimir toda la superficie exterior de la camiseta con la sustancia.
Otro desafío es que, aunque la tinta ecológica está diseñada para ser resistente a los rayos UV, al ser una tinta de base biológica, obviamente, no será exactamente como una tinta a base de petróleo. Se necesita un cuidado especial para garantizar la durabilidad de la pieza. “Con el tiempo, el color negro puede aumentar el brillo de los bordes cerca de las costuras. Para que las algas duren el mayor tiempo posible, recomendamos lavar la camiseta a mano en agua fría con la menor cantidad de detergente posible ”, explica la empresa.

El uso de pigmentos naturales producidos por algas como alternativa al teñido químico ya ha sido probado en otro lanzamiento de Vollebak. Al igual que el primer modelo , la «camiseta de algas negras» también se descompone en el suelo en unas 12 semanas. “Una vez que el material ha desaparecido, solo la tinta de alga negra permanecerá en un estado casi imperceptible, seguro y no tóxico”, garantiza la empresa.

Fundada por los hermanos gemelos, diseñadores y atletas Nick y Steve Tidball, Vollebak ha ganado premios a la innovación de TIME, WIRED y Fast Company. La marca está presente en Europa y Estados Unidos.